En muchos negocios existe una práctica muy común: cobrarle la comisión que cobra la terminal por aceptar pagos con tarjetas al cliente, a veces se cobra un porcentaje adicional o bien lo simplifican en $4 adicionales por cada $100, esto por la sensación de que el vendedor está perdiendo al aceptar pagos con tarjetas; sin embargo esta es una práctica dañina para el negocio y que además afecta al cliente y a su impresión del negocio.
Para explicar esto debemos plantear la idea principal: la razón por la cual acepto tarjeta es agregar una opción de cobro y aumentar ventas. Entonces el hecho de cobrarle la comisión lo que estamos haciendo es en realidad desincentivar el uso de tarjetas ¿no es contraproducente? Claro esto puede variar mucho en la opinión de cada vendedor.
Se estima que al comenzar a aceptar pagos con tarjetas los negocios aumentan sus ventas en un 30% en promedio, en un ejemplo, si antes vendías $1,000 al día aceptando únicamente efectivo, al aceptar tarjetas puedes aumentar tus ventas a $1,300 o más. Viéndolo desde esa perspectiva, si el vendedor absorbe el costo de la comisión, en realidad ¿está perdiendo?
Recordemos que a diferencia de las terminales de cobro fijas, las terminales móviles no cobran renta mensual ni piden un mínimo de transacciones al mes, sólo la comisión base que varía de acuerdo a la compañía, en realidad esta comisión es el costo que los vendedores pagan por las ventajas de aceptar pagos con tarjetas, entre ellas, ampliación de los canales de venta, mayor seguridad, aumento del recibo de venta, agilización del proceso de venta entro otros, y la posibilidad de ofrecer meses sin intereses (MSI).
Además, según el Banco de México esta práctica está prohibida para los grandes establecimientos por medio de contratos con las compañías dueñas de las TPV, sin embargo, no existe una ley que regule la transferencia de cobro de las comisiones al cliente para las terminales móviles.
¿Y las comisiones por pagar a Meses Sin Intereses?
La comisión por financiamiento o por cobrar a meses sin intereses es el porcentaje adicional a la comisión base que depende de la cantidad de cuotas, cuando cobramos a MSI pagamos una comisión mayor aunque recibimos el total del dinero al instante, es el cliente el que paga las mensualidades a su banco, al vendedor ya no le debe dinero.
En el caso del costo de financiamiento si es recomendable transferirlo al cliente, pues en general es una tasa menor de lo que el cliente pagaría de intereses ordinarios a su banco, si el cliente tiene esta necesidad podemos ofrecerle esta opción. La mayoría de las terminales móviles permiten transferir esta comisión al cliente, es a criterio de cada vendedor, pondré como ejemplo a la compañía de Mercado Pago con su terminal Point Blue:
A la izquierda el costo de financiamiento a cargo del comprador, a la derecha el costo de financiamiento a cargo del vendedor, a la derecha de cada cantidad de cuotas se muestra lo que se le va a cobrar al cliente:
Conclusiones
Si empezamos a aceptar pagos con tarjetas es porque queremos vender más incentivando su uso, transferirle las comisiones al cliente final hace precisamente lo contrario, desincentivar su uso. Al final hay que analizar si en verdad estamos perdiendo al absorber la comisión base, el el tema costo por financiamiento es recomendable cobrarle la comisión por el financiamiento, pero no la comisión base. Esto hará que se incentive su uso y se genere confianza en el establecimiento o vendedor.